Celulitis y grasa localizada, que son, en que se diferencian y su tratamiento médico-estético

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Celulitis y grasa localizada, que son, en que se diferencian y su tratamiento médico-estético

Frecuentemente oímos hablar de la celulitis refiriéndose a la grasa que se nos acumula en algunas zonas de nuestro cuerpo, como también cuando se nos marcan los hoyitos de la piel, conocida como “piel de naranja”, por su apariencia y semejanza con esta fruta.

A continuación te contamos que son exactamente cada una de ellas.

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Grasa localizada y celulitis son dos patologías diferentes que en muchos casos aparecen simultáneamente.

¿Qué es la celulitis?

La celulitis es una patología funcional y estética caracterizada por el deterioro del aspecto de la superficie cutánea, que afecta especialmente a la mujer en miembros inferiores: nalgas, muslos, rodillas y tobillos; y también en abdomen y cintura, y es debida a alteraciones anatomo-fisiológicas del tejido adiposo subcutáneo por acúmulos de agua y residuos y mala circulación en la zona afectada. En ningún caso puede considerarse como un exceso de grasa.

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Tiene una patología multifactorial, compleja y aún hoy en día no se conoce totalmente. Las hipótesis más aceptadas son:

  • Predisposición genética, anatómica y hormonal.
  • Hábitos alimenticios.
  • Origen étnico.
  • Disfunción microcirculatoria.
  • Toxicidad tisular.

Su desarrollo nunca es homogéneo en el tejido adiposo subcutáneo, de modo que en el mismo paciente puede presentar diferentes fases en distintas localizaciones.

«En el desarrollo y evolución de la celulitis existen diferentes fases según el daño tisular en el tejido graso que forma esos acúmulos con diferentes características: blanda, edematosa (con retención de líquidos) o fibrótica (dura o compacta), lo que implica que los tratamientos a realizar serán diferentes según el diagnóstico de cada caso.»

Celulitis blanda

Es sin lugar a dudas, la más común de todas. De mucha flacidez y característica esponjosa y gelatinosa. La zona afectada, blanda a tacto, no presenta consistencia, hundiéndose al tocarla y “la piel de naranja” es muy evidente. Afecta principalmente a mujeres mayores de 40 años y bastante extendida en muslos y glúteos, y generalmente no es dolorosa.

Celulitis dura, compacta o fibrosa

Se la llama de este modo por su consistencia firme y dolorosa al tacto (incluso sin tocar ni presionar los nódulos), es causada por una mala circulación de la sangre, siendo generalmente de localización preferente en caderas. Se reconoce fácilmente porque es muy difícil de pellizcar. Habitualmente se presenta en mujeres jóvenes con buena forma física, en mujeres con sobrepeso y en obesas.

Celulitis edematosa

Se presenta exclusivamente en las piernas, es causada principalmente por retención de líquidos y presenta síntomas tanto de la celulitis blanda como de la celulitis dura o compacta. Las piernas se hinchan y engordan hasta adoptar un aspecto casi recto. En algunos casos, puede ser un poco dolorosa al tacto y pueden apreciarse los nódulos, como ocurre en los casos de celulitis blanda.

¿Qué es la grasa localizada?

La grasa localizada consiste en la acumulación de tejido graso en determinadas zonas del cuerpo que provocan una alteración estética del contorno corporal. Lo habitual cuando hablamos de grasa localizada es que ésta no vaya acompañada de sobrepeso, aunque pueda ir también acompañada de sobrepeso.

En base a las causas que la originan, la grasa localizada la podemos clasificar en 2 tipos.

  • La grasa localizada primaria es aquella relacionada con el desarrollo hormonal, y es generalmente hereditaria. Suele afectar la forma de la silueta corporal a los costados de los glúteos y es conocida como “cartucheras”.
  • La grasa localizada secundaria es debida a malos hábitos en la alimentación y la falta de ejercicio físico.

La adiposidad localizada puede aparecer en papada, brazos, rodillas, abdomen, flancos, espalda… La adiposidad localizada no produce dolor.

La diferencia más importante entre los tipos de grasa localizada es que, una adiposidad localizada secundaria responderá bien a una dieta combinada con ejercicio físico, mientras que una adiposidad localizada primaria será muy difícil de mejorar de esta forma.

En ocasiones, junto a la celulitis se puede sufrir un aumento de volumen provocado principalmente por dos factores: la retención de líquidos en la dermis y la sobrecarga de grasa en los adipocitos o células grasas de la hipodermis.

En este caso es recomendable aplicar un tratamiento combinado para ambas patologías.

Tratamiento de la celulitis y la grasa localizada

Hoy en día disponemos de un amplio abanico de tratamientos médicos y estéticos para estas patologías, que en muchos casos son una alternativa a la cirugía.

En clínica Línea Ideal disponemos de tratamientos y técnicas que han demostrado su eficacia y nos permiten tratar la celulitis y la adiposidad localizada. Técnicas que combinamos según el diagnóstico de las necesidades de cada paciente, consiguiendo que los efectos de cada una de ellas se vean potenciados y complementados obteniendo mejores resultados que con el uso aislado de cada una de ellas.

Entre estas técnicas podemos destacar las siguientes:

LPG Endermologie

Realiza una mecanización tisular óptima sobre todo en las células grasas de la hipodermis. Esta gimnasia cutánea permite reestructurar el tejido conjuntivo y reactiva la circulación sanguínea y linfática, lo que favorece la eliminación de los desechos metabólicos.

VelaSmooth

Realiza una mecanización tisular junto con la acción combinada de los infrarrojos y la radiofrecuencia, que permiten trabajar las células de grasa a un nivel más profundo y estimular al mismo tiempo el colágeno para evitar la flacidez.

Radiofrecuencia con Venus Freeze Plus
Está especialmente indicado para el tratamiento de la celulitis, el estiramiento de la piel, la remodelación del contorno corporal, y como terapia dérmica volumétrica, como complemento post-liposucción y para tratamientos de lipomas.

Mesoterapia

Consiste en la administración intradérmica o subcutánea de distintas sustancias a dosis pequeñas (aminoácidos, vitaminas, oligoelementos, vasodilatores y otros), por medio de múltiples inyecciones, aplicadas en la zona a tratar que activa la circulación local, mejora la oxigenación de la piel, favorece la lipólisis o movilización (quemado) de las grasas, favorece la permeabilidad de la pared de las células grasas y reafirma los tejidos.

Alidya

Es el primer inyectable médico indicado específicamente para la prevención y el tratamiento de la lipodistrofia ginoide (celulitis). Su formulación, compuesta por una mezcla de aminoácidos y un quelante de metales, asociados a un sistema alcalinizante del espacio extracelular, es capaz de devolver el equilibrio a la estructura del tejido adiposo.

Carboxiterapia

La carboxiterapia es un tratamiento consistente en la infiltración subcutánea de dióxido de carbono (CO2). Este gas estimula la vasodilatación del sistema circulatorio, aumenta la actividad lipolítica en el tejido graso, a la vez que se oxigenan los tejidos superficiales y se previene la flacidez. Como resultado, el número de células de grasa es menor y la piel se estira mejorando la elasticidad de la piel, reduce la celulitis y la grasa localizada y mejora la producción de colágeno.

Lipoláser

El tratamiento consiste en introducir una fina fibra óptica láser bajo la piel que por calor produce una quemadura interna en las zonas de flacidez y además produce un efecto de licuado de las células grasas en las zonas con adiposidad localizada como papada, cara interna de rodillas, cartucheras, abdomen o caderas, etc.

Tenemos el tratamiento que mejor se adapta a tus necesidades para luchar contra la celulitis y la grasa localizada, no dudes en consultarnos.

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